Seamos sinceros. Chisinau no es la capital más bonita del mundo, pero que pertenezca al país menos turístico de Europa le da ese toque interesante.
Es un bus nocturno interminable desde Kiev crucé la frontera más surrealista de mi vida al entrar, antes de Moldavia, en el «país fantasma» autoproclamado independiente, Transnistria, del cual hablo más abajo.
Con 1 o 2 días es suficiente para recorrer Chisinau y descubrir lo más importante que hacer y ver en la capital de Moldavia, este desconocido país. ¡No te lo pierdas!
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1- Admirar el colorido Monasterio de Ciuflea
El Monasterio ortodoxo de Ciuflea es, en mi opinión, el lugar más bonito de Chisinau. ¡Se agradece tanto colorido en una ciudad donde realmente escasea!
Construido en 1854, sus cúpulas doradas y ese azul intenso hace que no pase desapercibido.
Además, el interior de la Iglesia principal, la de San Teodoro de Amasea, y la capilla de la entrada merecen pegarse el paseíto hasta llegar allí.
2- Entrar en la Catedral Metropolitana de la Natividad
La Catedral Metropolitana de la Natividad es el edificio más reconocido de la capital moldava.
Fue bombardeada durante la Segunda Guerra Mundial y su campanario fue destruido, pero hasta 1997 no se empezó a reconstruir el nuevo.
Recomendable visitar el interior. Yo tuve la fortuna de presenciar un bautizo ortodoxo, muy diferente al católico.
Aún siendo el centro de la ciudad, pasaba tan poca gente por la zona que me dio tiempo a hacer mil fotos chorras…
3- Visitar el icónico Arco del Triunfo
En la misma plaza de la Catedral se ubica el Arco del Triunfo, frente al Parlamento.
Construido tras la victoria del Imperio Ruso frente al Otomano en la guerra de 1828 y 1829.
No te esperes un Arco del Triunfo como el de París pero es una de los monumentos más interesantes de visitar en Chisinau.
A destacar la enorme bandera de Moldavia que ondea bajo el Arco.
4- Degustar la gastronomía típica de Moldavia
Quizás lo que más disfruté de Moldavia fue… ¡Su comida!
Con influencias rumanas, ucranianas y de otras zonas de Europa del Este, tiene platos deliciosos y, además, muy baratos.
Un par de restaurantes que recomiendo. La Placinte, un clásico, y Andy’s Pizza, que tiene de todo y abre 24 horas.
Buenísimas sus sopas, la crema de champiñones dentro del pan o la típica Placinta.
¡Y por supuesto, la cerveza moldava!
5- Fotografiar y fotografiarse con las curiosas estatuas callejeras
Si callejeas un rato por Chisinau te darás cuenta que te irás encontrando originales estatuas súper curiosas.
Uno no puede evitar hacer y hacerse fotos con ellas.
Estas se encuentran en la calle Eugen Doga, la de los niños en la puerta del Hotel Zentrum y la del Papa Juan Pablo II en la Catedral de la Divina Providencia.
6- Desconectar en el Parque Esteban el Grande
Parque bien cuidado en pleno centro para grandes y pequeños.
En el parque se ubica el Callejón de los Clásicos, con bustos de personas reconocidas de la historia local.
Perfecto para desconectar un rato y respirar aire puro.
7- Pasear por el comienzo de la calle Eugen Doga y el Boulevard Stefan cel Mare si Sfant
El comienzo de la calle Eugen Doga es territorio de artistas que muestran y venden sus obras.
Aquí tenemos el Bonjour Cafe, un coqueto kiosko con mesas al aire libre que le da el toque a la zona.
Por otro lado, el Boulevard Stefan cel Mare si Sfant, calle principal de Chisinau y eje principal de la capital, donde se encuentran los ministerios, embajadas, bancos y muchos de los edificios más antiguos y bonitos de la ciudad.
Por cierto, ¡aquí se siguen utilizando los trolebuses!
8- Mezclarte con los locales en el Mercado Central
El Mercado Central de las ciudades es casi siempre el lugar idóneo para comprar comida u objetos a muy buenos precios y ver el ajetreo de la gente local.
Es enorme y el final colinda muy cerca de la estación de autobuses, así que no te extrañes si te cruzas con gente que te pide dinero o similares si llegas hasta allí.
9- Culturizarse en los Museos Nacionales de Historia y de Arte de Moldavia
Siempre es interesante adentrarse en la historia del país que se está visitando, y más en uno que ha sufrido tantos cambios a lo largo de los Siglos.
Estos dos museos se encuentran muy cerca y ya por fuera merece la pena pasarse a echarles un vistazo.
Como curiosidad, en el Museo Nacional de Historia había una exhibición fuera llamada «El Prado en las calles», con cuadros del Museo del Prado de Madrid y textos en español.
10- Acercarse a la Catedral de la Divina Providencia y al Teatro Nacional de Ópera y Ballet de Moldavia
Aunque el edificio de la Ópera puede que sea el más feo de todos las que he visto hasta la fecha, por dentro la cosa cambia y además existe la posibilidad de ver obras a muy buenos precios.
En la plaza de la Ópera están las típicas letras de «I love Chisinau«.
Y al lado la Catedral de la Divina Providencia. Esta, a diferencia de las otras, católica y no ortodoxa. De ahí que estuviera la estatua del Papa Juan Pablo II.
*BONUS: Descubre el resto de Moldavia, especialmente Transnistria, «el país fantasma»
Aunque yo no pude descubrir el resto de Moldavia por culpa de la pandemia (la mayoría de transportes estaban suspendidos, especialmente para cruzar hacia y desde Ucrania) es algo que me ha quedado pendiente.
Lo que sí pude es pasar por Transnistria, oficialmente ‘Unidad territorial autónoma con un estatus jurídico especial Transnistria’.
Este país no reconocido por nadie salvo por ellos mismos tiene su propia frontera, su propia moneda y sus propias leyes.
Con lo cual fue una de las fronteras más surrealistas que recuerdo cruzar en toda mi vida. ¡No una si no varias fronteras realmente!
Se quieren independizar, entre otras cosas, porque tienen ideologías más rusas-soviéticas. De ahí que tengan la hoz y el martillo en el escudo.
Si quieres profundizar más la Wikipedia de Transnistria te lo cuenta mejor que yo :)
¿Dónde dormir en Chisinau?
Yo me alojé en un precioso apartamento del Hotel Zentrum y todo genial.
Habitación enorme. Desayuno buffet. Ubicación excelente. 100% recomendable.
Pero si quieres buscar otra cosa puedes encontrar el alojamiento en Chisinau que más te guste directamente desde este enlace.
Una visita corta pero intensa para descubrir la capital moldava.
Tras Moldavia y Lviv, la ciudad más bonita de Ucrania, llegaba el turno de visitar los países Bálticos.
Primer país… ¡Lituania! y su capital Vilna. Toda la info en el siguiente post :)
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Laura dice
Qué maravilla de post, me encanta!! Apenas conocía nada de Moldavia y ahora tengo mil ganas de ir! ¿Cómo lo ves para viajar sola como mujer? ¿Hay muchos mochileros por allí?
Javi (Mi Aventura Viajando) dice
Hola Laura!
Muchas gracias por tus palabras y pasarte a comentar.
Pues el tema de viajar sola es totalmente seguro, con las precauciones habituales pero un país europeo al fin y al cabo.
Mochileros yo no ví a ni uno. Pero maleteros tampoco :) Básicamente no vi a un solo turista en todos los días que estuve allí.
También influiría la pandemia, pero vamos que a Moldvia no va casi nadie.
Un saludo y disfrútalo si terminas yendo!
Javi.