Hong Kong, el gigante asiático y su fantástico skyline ¡Turismo de altura!

Las otras dos noches me alojé en el YHA Mei Ho House Youth Hostel del mismo grupo pero en Kowloon, barrio más humilde. Fue la primera casa pública de todo Hong Kong y lo han reformado para crear este hostal manteniendo su forma de H. ¡Tiene hasta un museo dentro súper interesante! Acostumbrado a los cuartos compartidos del Sudeste Asiático esto es un lujazo en toda regla.

Cualquiera de las dos opciones son más que recomendables y están entre lo más económico del país. Y es que no nos vamos a engañar, dormir en Hong Kong barato precisamente, no es.

Como anécdota, dos empleadas del hotel me realizaron una entrevista para la revista de la compañía sobre mi historia y mis viajes. Me enseñaron las instalaciones y más tarde me llevaron a comer a un restaurante de comida local increíble. ¡Con estrellas Michelín y todo! Se me salía un poco de presupuesto pero un día es un día.

Hong Kong se divide en dos claras zonas turísticas. Hong Kong Island y Kowloon, conectadas tanto por un puente como por metro o ferry.
En Hong Kong Island se encuentra el centro financiero y la mayoría de los rascacielos importantes de la ciudad. Algunos de ellos fueron el edificio más alto del mundo en su época. Two International Finance Centre, Central Plaza o Bank of China Tower están entre los 30 rascacielos más altos del mundo actualmente.

Dolor de cuello de tanto mirar para arriba. Pero no solo las oficinas son impresionantes, las viviendas particulares son rascacielos infinitos igualmente.
Un buen punto para ver tanto el skyline de la isla como el de enfrente es el Observatorio del Puerto. Es espectacular tanto de día como de noche.

El punto más conocido para ver el skyline y el Puerto Victoria desde las alturas y la distancia es Victoria Peak. Se puede subir en el famoso funicular que cuesta 90 HK$ o en el bus público número 15 como hice yo, el cual nadie conoce y te cuesta 10 veces menos, 9 HK$. La verdad, ya sea por la niebla que amenazaba o porque tenía las expectativas muy altas con este sitio me esperaba mucho más. Aun así las vistas son una pasada.

Como curiosidad, hay un restaurante Bubba Gump, de la película Forest Gump. Me recordó a mi viaje por la Costa Oeste de EEUU que es donde se encuentra el original.

En el mismo Victoria Peak se encuentra el Trick Eye Museum. Ni lo conocía ni pensaba entrar en un principio, pero como quería esperar a que anocheciera utilicé la táctica del carnet de prensa y tras convencer a los responsables entré sin pagar. La verdad que para echarse unas risas está muy bien. Diferentes fondos en 3D que deja unas instantáneas la mar de curiosas.

Así como de Victoria Peak me esperaba más, lo que me alucinó fue subir al mirador 360° del piso 75 del Central Plaza. En principio el oficial está en el piso 46, pero yo que soy un inconformista confeso, le eché un poco de morro y subí hasta el 75. Coincidió que estaban preparando un evento privado y me dejaron estar un rato. ¡Los demás rascacielos parecen de juguete! Es increíble la vista desde allí. ¿Alguien dijo vértigo?

*Como curiosidad, en este piso 75 se encuentra la iglesia más alta del mundo. ¡En ningún otro lugar podrás decir que te encuentras más cerca de Dios que aquí! :)

Pero no todo van a ser edificios de impresión kilométricos. Entre tanta bestia de acero se puede visitar el Hong Kong Convention and Exhibition Centre, donde se encuentra la Golden Bauhinia Square, que a mi me recordaba más a una alcachofa que a una flor. Varios museos como el Dr. Sun Yat-sen o el de Ciencias Médicas, la Catedral St. John’s, la calle de antigüedades Ladder Street, el Templo Man Mo o diferentes parques para respirar y poder ver el cielo un rato, cosa realmente difícil algunas veces.

Punto a parte tienen los tranvías de la ciudad. ¡Me encantaron!

Al otro lado del río se encuentra Kowloon. Esta zona no iba a ser menos y los edificios son del estilo. La estrella y edificio mas alto del país, el International Commerce Centre, se encuentra aquí. Con 484 metros de altura y 118 plantas, en la actualidad es el octavo rascacielos más alto del planeta. De noche se proyectan imágenes y mensajes, pero lo más curioso es cuando ves juegos de toda la vida como los marcianitos o el comecocos a tamaño desproporcionado.

Todos los días a las 8 de la noche reproducen el espectáculo de luces y sonido «A Symphony of Lights». Catalogado como el más grande por el Libro Guinness de los Records. El mejor lugar para verlo, tanto el espectáculo como el skyline de día y de noche, es desde el Paseo de las Estrellas, ese del estilo al de Hollywood con un montón de estrellas en el suelo asiáticas, de las cuales creo que solo conozco a Jackie Chan y a Bruce Lee.
Por cierto, el espectáculo un poco decepcionante. Quizás el listón lo tengo muy alto después de ver el de Singapur.

Esta zona cercana a Victoria Harbour se conoce como Tsim Sha Tsui, donde tienes la opción de visitar museos como el de Ciencia o el de Historia, tiendas de las firmas más selectas del mundo o el Parque Kowloon donde puedes encontrarte con flamencos o una piscina bastante apetecible.

Kowloon es más auténtica que el centro financiero. Más humilde y donde se puede ver otro estilo de vida. Luces de neón en cualquier dirección que uno mire se mezclan con mercados callejeros, como Dundas Street, en Mong Kok, la zona donde yo vi más ambiente en la ciudad. Muy cerquita está la conocida como Goldfish Street (Tung Choi street) repleta de tiendas de peces de todos los tamaños y colores.

A todo esto me acordé de mi ex-trabajo, en ese que estuve casi 5 años y que meses atrás dejé para recorrer mundo. La empresa es hongkonita y me dieron ganas de visitar las oficinas. Por la coña más que nada. No lo hice porque estaban a tomar por saco que si no me hago unas fotos allí y se las hubiera enviado a mis ex-compañeros. ¡Cómo me ha cambiado la vida! Quién me lo iba a decir…

Mis días en este gigante asiático terminaban y era momento de ir al aeropuerto, uno de los mejores del mundo por cierto, y tomar un avión para volver al Sudeste Asiático después de este break en Taiwan y Hong Kong.

Mi siguiente destino es Filipinas, y con un objetivo principal destacable por encima de todo. ¡Bucear! Y es que Filipinas es uno de los mejores lugares del mundo para practicar esta actividad que hace unos meses ni me había planteado y ahora me tiene enganchado. Empezaré por la paradisíaca Talipanan Beach y Puerto Galera. ¡Allá voy!

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